Necesitas
asegurar tu coche, no quieres pagar por lo que no vas a usar, pero tampoco
hacer renuncias o evitar servicios que en poco tiempo echarás de menos. Conocer
los tipos de seguro que existen y lo que supone cada uno de ellos es el primer
paso para poder elegir el seguro perfecto para tu coche.
1) Seguros a terceros
Este primer tipo de póliza es el más
sencillo y básico, como indica su nombre. Es el seguro mínimo que por ley tiene
que tener todo coche para poder circular. Se conoce como seguro a terceros o
seguro básico.
Todo seguro a terceros debe incluir el
seguro de responsabilidad civil que se exige para circular. Este tipo de
cobertura cubre los daños materiales y personales que el coche asegurado cause
a terceros. El coche asegurado y el propio conductor quedan fuera de la
protección del seguro obligatorio.
Este seguro básico suele incluir una
extensión de la responsabilidad civil que se conoce como responsabilidad civil
suplementaria que amplía económicamente el seguro de responsabilidad civil del
asegurado.
La responsabilidad civil por remolques y
caravanas, y para los objetos transportados en el vehículo, también suele estar
incluida en un seguro a terceros. Junto con la defensa jurídica, reclamación de
daños y la asistencia en viaje.
El seguro de conductor empieza también a
incorporarse en las pólizas a terceros pero no siempre es así, por lo que es
importante que tengas en cuenta este detalle al comparar y elegir tu seguro de
coche.
2. Seguros a terceros ampliados
De acuerdo con las necesidades y demandas
de los conductores actuales, las compañías aseguradoras han incrementado su
oferta de seguros a terceros ofreciendo un tipo de pólizas algo menos básicas,
pero no tan completas como las que se denominan todo riesgo.
En este grupo de pólizas de seguro de
coche a terceros ampliados o completos, encuentras un amplio conjunto de
coberturas que puedes elegir de manera independiente o en formato de paquetes,
según las diferentes compañías. La cobertura de la rotura total o parcial de
lunas o parabrisas, el seguro por incendio o la reparación de los daños que
sufra el coche, si atropella a algún animal, por ejemplo; son de las más
habituales en los seguros a terceros ampliados.
La pólizas de terceros más completas
ofrecen al conductor servicios y asistencias más específicas como la
responsabilidad civil del tomador y conductor declarado como ciclista, la
responsabilidad civil del hijo menor de edad conduciendo sin carné, la defensa
en multas de tráfico, subsidio por privación del permiso de conducir, robo del
vehículo, la limpieza del vehículo por traslado de heridos o los intereses y
gastos del préstamo para la reparación del vehículo.
Este tipo de seguros a terceros con
coberturas ampliadas es muy interesante para que el conductor pueda completar
su protección y la de su vehículo en función de su uso, prioridades y
necesidades, sin tener que renunciar a nada esencial, aunque elijas una póliza
a terceros.
3. Todo riesgo (cobertura amplia)
Los seguros de auto con cobertura amplia o a todo riesgo ofrecen
una completísima gama de coberturas, asistencias y servicios para el conductor
y su vehículo. Incorporan, por supuesto, las obligatorias como el seguro de
responsabilidad civil, pero también todas las que completan las pólizas a
terceros como la rotura de lunas o el robo del vehículo.
Las pólizas a todo riesgo incluyen
coberturas que sí cubren tanto al conductor, como al propio coche asegurado en
caso de verse involucrado en un accidente con independencia de que sea o no el
causante; igualmente, aunque no haya terceros, como en el caso de golpes o
daños durante un estacionamiento, el coche asegurado a todo riesgo está
protegido en estas circunstancias también.
Servicios prácticos y de uso habitual por
los conductores, como el vehículo de sustitución o la defensa de multas de
tráfico, son también facilidades que disfrutan los titulares de seguros de
coche a todo riesgo.
Hay dos modalidades básicas dentro del
seguro a todo riesgo. Puedes encontrar pólizas a todo riesgo con o sin
franquicia.
Los seguros a todo riesgo sin franquicia
son los más completos y efectivos que se pueden contratar para proteger un
vehículo, la responsabilidad sobre la protección del coche asegurado cae de
manera exclusiva e integra sobre la compañía aseguradora. Las máximas
coberturas ante cualquier eventualidad o posibilidad quedan recogidas en este
tipo de seguros que dan respuesta a todas las necesidades y demandas de los
conductores con independencia de cuáles sean sus circunstancias.
Las compañías aseguradoras comercializan
para completar su oferta de seguros de coche, pólizas exclusivas y con
diferentes coberturas para conductores específicos como por ejemplo,
conductores jóvenes, conductores experimentados, conductores profesionales o
coches ecológicos. Este tipo de contratos encierran primas más baratas o
ventajas para determinados clientes, además de bonificaciones o coberturas
exclusivas de gran interés.
Los seguros de coche pueden ser por tanto
o a todo riesgo o a terceros, pero ten en cuenta que dentro de cada una de
estas dos opciones hay una gran cantidad de detalles que pueden cambiar de unas
compañías a otras. Por otra parte, los asegurados deben atender a las
cantidades económicas que se aseguran –límites de gasto- en cada una de las
coberturas y que pueden suponer una importante diferencia en el precio final,
pero también un grado de protección muy distinto.